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10 AÑOS SIN JUANITO.-
El 2 de abril se cumplieron 10 años de la muerte en accidente de tráfico de uno de los jugadores más carismáticos del Madrid. Juan Gómez, conocido siempre como "Juanito". El malagueño llegó al Madrid en 1977 procedente del Burgos, y pronto destacó por dos cosas: su impresionante clase dentro del campo... y su irreductible carácter que le hacía perder los papeles demasiado a menudo. Díscolo, rebelde, y tremendamente sincero, formó parte del Madrid en una época más bien gris, la que empezaba a echar de menos la gloria europea y que daría paso a la Quinta del Buitre. No obstante, ganó cinco Ligas y dos Copas del Rey, a las que se añadieron dos Copas de la UEFA.
Juanito se ganó pronto el cariño de la afición por su entrega, su clase y su instinto natural para hacer del fútbol un arte. En la memoria de los aficionados sigue presente un gran gol de vaselina al Barcelona de Maradona en el mismísimo Camp Nou, o sus muestras de júbilo cuando, tras remontar un 5-1 al Borussia Moenchedgladbach, fue sustituido en el último minuto: Juanito cruzó todo el campo saltando y mostrando su alegría por la proeza conseguida. En el lado negativo, su reprobable pisotón en la cabeza a Lothar Matthaeus o su enfrentamiento con el también ex madridista Uli Stielike cuando éste visitó al Madrid con el Neuchatel suizo.
Madridista de pro, sólo dejó el club para jugar dos años en el equipo de su ciudad natal, el Málaga, y recibió una calurosísima bienvenida a la que siempre fue su casa cuando jugó contra "su" Madrid. Tras colgar las botas se dedicó a entrenar, imprimiendo su sello en el modesto Mérida. Muchos veían en él a un inevitable entrenador del Madrid, pero un accidente de tráfico, precisamente cuando volvía a Mérida tras ver un partido en el Bernabéu, hizo que todos sus sueños se truncaran.
La única realidad es que, 10 años después de su muerte, los aficoonados siguen coreando de vez en cuando el grito de guerra que siempre le dedicaron: ILLA, ILLA, ILLA... ¡¡JUANITO MARAVILLA!!
LA LEYENDA EUROPEA (IV) 1959:REAL MADRID 2 - STADE REIMS 0.-
Un viejo conocido esperaba al Madrid al final del camino hacia la Cuarta Copa de Europa. Los franceses del Stade de Reims llegaban con ganas de revancha tras perder tres años antes y en su casa la primera final del Torneo de clubes más importante. Esta vez, sin embargo, el genial jugador francés Kopa defendía la camiseta blanca, enfdrentándose a sus antiguos compañeros. Antes, Besiktas, Wiener Sport Club (que encajó un abrumador 7-1 en Madrid) y Atlético de Madrid tuvieron que dejar paso al Campeón único hasta el momento. Curiosamente, el resultado ante los eternos rivales de Madrid hubiera dado el pase a éstos si el choque hubiera tenido lugar hoy: 2-1 en Chamartín y una derrota por 1-0 en el antiguo Metropolitano obligaron entonces, sin embargo, a jugar un desempate en Zaragoza ganado por 2-1.
La final, jugada en el Neckarstadion de Stuttgart, se decidió al inicio de cada tiempo. Un gol de Mateos en el minuto 4 y otro de Di Stefano en el 47 bastaron para prolongar el reinado continental un año más, aunque el partido no tuvo el nivel del histórico enfrentamiento de 1956.
La cuarta alineación ganadora fue: Domínguez, Marquitos, Santamaría, Zárraga, Santisteban, Antonio Ruiz, Kopa, Mateos, Rial, Di Stefano y Gento.
LA LEYENDA EUROPEA (III) 1958:REAL MADRID 3 - MILAN 2.-
Amberes, Sevilla y Vasas de Budapest fueron los rivales que el Madrid eliminó antes de afrontar la segunda defensa de su título de Rey de Europa.
Especialmente emotiva fue la eliminatoria conytra el Sevilla, que fue el segundo equipo español en jugar esa edición. Los andaluc¡es fueron barridos del Bernabeu por 8-0 en la ida, lo que hizo un viaje de turismo la vuelta. El balance del Madrid en su campo fue espectacular: 6-0 a los belgas, 8-0 al Sevilla y 4-0 al Vasas
El Madrid jugó la final en Bruselas, con el recién construido Atomium asomando por encima del estadio Heysel. El rival fue el Milan de Schiaffino, Liedholm y Maldini, y fue posiblemente la final más dura que tuvo que afrontar el Madrid. Por dos veces se adelantaron los italianos, pero el Madrid reaccionó bien, con goles de Di Stefano y Rial. La prórroga, circunstancia que la UEFA no había previsto y que decidió sobre la marcha, vino marcada por el cansancio de los jugadores, y ahí la velocidad de Francisco Gento decidió el partido con el gol que dejaba la Copa un año más en Madrid.
La tercera alineación campeona, según Gento la mejor y más completa del histórico Madrid de los 50 fue: Alonso; Atienza, Lesmes; Santisteban, Santamaría, Zárraga; Kopa, Joseíto, Di Stéfano, Rial y Gento
LA LEYENDA EUROPEA (II) 1957:REAL MADRID 2 - FIORENTINA 0.-
Tras el éxito del año anterior, el Madrid defendió su título de primer rey de Europa con brillantez. Antes del encuentro final, el equipo de entrenado por Villalonga tuvo que superar a una de las mejores formaciones de la Historia, el Manchester United de Bobby Charlton. Tras esta durísima semifinal, el Madrid se enfrentó a la Fiorentina en casa, siendo esta la primera final europea que ha albergado el Santiago Bernabéu
El partido, aún siendo duro, dio muchos menos sorbesaltos que la final de París del año anterior. La Fiorentina aguantó con el típico catenaccio italiano de la época, pero un penalty transformado por la "Saeta Rubia", Di Stefano, abrió el camino al título. Luego, Gento sentenció la final y los jugadores del Madrid pudieron dar la vuelta de honor ante el público español.
Los campeones de 1957 fueron: Alonso,Torres , Marquitos , Lesmes , Muñoz ,Zarraga ,Kopa , Mateos ,Di Stefano, Rial y Gento.
LA LEYENDA EUROPEA (I) 1956:REAL MADRID 4 - STADE REIMS 3.-
El desarrollo del fútbol como espectáculo y el resurgir de Europa tras la Segunda Guerra Mundial hicieron posible la gestación de una idea que iba a servir para derribar muchas fronteras: un campeonato europeo de clubes. La idea, promovida en inicio por el diario francés L'Equipe, fue seguida con entusiasmo por el Presidente del Madrid, Santiago Bernabéu.
Así, en 1955 el Real jugó su primer partido de la nueva competición contra el Servette suizo, partido que ganó cómodamente por 0-2. Tras eliminar a los suizos, posteriormente cayeron el Partizan y el Milan, para llegar ala final en el Parque de los Principes contra el Stade de Reims de las superestrellas Jonquet o Kopa.
El partido fue intensísimo, hasta el punto que el Madrid tuvo que superar un 0-2 y un 2-3 en contra para, con los goles de Di Stefano, Rial (2) y Marquitos conseguir el primero de los -hasta ahora- 8 títulos de la máxima competición continental en su palmarés.
EL Stade de Reims se convertiría en un rival asiduo en los últimos años 50. Juntos, y hasta la irrupción del Benfica portugués de Eusebio, dominaron el fútbol europeo, aunque en el camino de los franceses siempre se interpuso el Real.
LOS VUELOS DE SANTILLANA.-
A principios de los años 70 el Real Madrid se fijó en un joven jugador del Racing Santander, que daba sus primeros pasos en el fútbol de élite. Carlos Alonso, apodado Santillana en honor a su lugar de nacimiento (Santillana del Mar, Cantabria), correspondió luego a ese interés convirtiéndose en uno de los mejores arietes de la historia del Madrid.
Los primeros años en el Real vinbieron marcados por una gravísima afección renal que puso en serio peligro su carrera futbolística, ya que obligó a la extirpación de uno de estos órganos. No obstante esta dificultad, el pundonor del jugador le permitió pronto destacar como un formidbale delantero, con instinto goleador y con una habilidad que pocas veces se ha visto igualada en el Bernabéu: su espectacular capacidad de salto y su mortal remate de cabeza. De esta forma, primero con Roberto Martínez y posteriormente con el inolvidable Juanito, la delantera del Madrid contó con un seguro goleador fuera de toda duda.
Santillana no era especialmente hábil con los pies. Su juego era muy similar al del delantero chileno Iván Zamorano, y su pundonor le convirtió en uno de los símbolos madridistas antes de la irrupción de la Quinta del Buitre.
En el final de su carrera, su comportamiento fue tan ejemplar como en un sus mejores años. Santillana fue aceptando sin problemas el relevo generacional que le dieron Butragueño y Hugo Sánchez, aportando su experiencia en el vestuario y en los momentos más difíciles de los partidos.
El jugador se despidió de la afición en 1988, marcando uno de sus característicos goles de cabeza ante el Real Valladolid.
MADRID-BAYERN, UNA RIVALIDAD HISTÓRICA.-
La semifinal de este año entre Real Madrid y Bayern de Múnich supone el útlimo de una serie de enfrentamientos entre dos gigantes del fútbol europeo que siempre han dado mucho que comentar, desde que en 1976 se enfrentaran por primera vez en la máxima competición continental.
Lo cierto es que el campeón bávaro es uno de los pocos equipos del mundo que pueden presumir de tener un historial muy favorable en sus enfrentamientos con el Madrid. En 1976, el Bayern se impuso en una eliminatoria dura que vio al entonces delantero Roberto Martínez abandonar el Bernabéu con una fractura nasal. El encuentro de Madrid provocó uno de los incidentes más tristes para la memoria del club, cuando el llamado "loco del Bernabéu" agredió al árbitro austriaco Linemayr, provocando una contundente represalia por parte de la UEFA.
Tras este choque, la rivalidad entre ambos equipos creció a lo largo de encuentros teóricamente amistosos, como el humillante 9-1 que el Madrid encajó en el Olímpico en 1980, o el desplante que el Bayern dio a los aficionados blancos cuando abandonó su partido del Trofeo Santiago Bernabéu, obligando a suspender el choque contra el Dinamo de Tiflis.
En épocas más recientes, destaca la agresión del fallecido Juanito a Lothar Matthäus en la semifinal de 1987, las provocaciones de Klaus Augenthaler al Bernabéu en la vuelta de esa eliminatoria, o la exhibición blanca en el choque de cuartos de final un año más tarde.
El año pasado se vivió una circunstancia peculiar: pese a enfrenatrse en cuatro ocasiones, con tres victorias bávaras, el Madrid ganó el enfrentamiento decisivo de semifinales y alcanzó la final que le proclamaría campeón por octava vez. En breve sabremos si los alemanes alcanzan la revancha en la complicada vuelta del Olympiastadion.
CIBELES, LA DIOSA BLANCA.-
Los aficionados del Real Madrid tenemos la fortuna de poder celebrar a menudo los éxitos del club. Aunque los seguidores blancos son legión en toda España, y aún fuera de ella, el centro neurálgico de las celebraciones es la Plaza de Cibeles de Madrid, y en concreto la estatua de la Diosa que da nombre al lugar.
A principios de los 80, algunos aficionados decidieron celebrar un gran partido de la selección española dándose un baño en la fuente que rodea la escultura. La idea tuvo éxito y los aficionados del Madrid acabaron convirtiendo la estatua de Cibeles en el segundo lugar sagrado del madridismo, tras el estadio Bernabéu, mientras, a imitación de esta costumbre, los aficionados del Atlético de Madrid han consagrado la vecina efigie del dios Neptuno para sus más ocasionales festejos.
Aunque en principio eran los aficionados los que invadían y a menudo "coronaban" la estatua, esta actitud incívica después de todo acabó cobrándose su tributo cuando uno de los brazos de la diosa fue arrancado y perdido, encontrándose semanas después cuando ya el daño había sido reparado. Desde entonces, sólo los jugadores tienen acceso a la estatua, y aún con justificadas reservas por parte de las autoridades, aunque la plaza sigue siendo el punto de reunión de los aficionados deseosos de celebrar los triunfos del equipo. Durante las últimas celebraciones con motivo de la Copa de Europa del 2000, la multitud se estimó en decenas de miles, y aunque algunos indeseables provocaron lamentables incidentes, en conjunto el lugar sigue siendo lugar de fiesta y alegría.
1980: LA FINAL MÁS BLANCA
.- En España, los equipos inferiores de cada club pueden jugar en categoría nacional hasta encontrarse en una categoría inmediatamente inferior a sus mayores. Además, hasta inicios de los 90, podían disputar la Copa, evitándose siempre los cruces directos entre equipos del mismo club.
Esta posibilidad dio origen a una de las páginas más hermosas de la Historia del Real Madrid, cuando, en 1980, el primer equipo se enfrentó en la final de la Copa del Rey al actual Real Madrid B, entonces llamado Castilla, que militaba en la Segunda División del fútbol español. El hecho, sin precedentes en Europa, se hizo inevitable cuando los "pequeños" fueron pasando ronda tras ronda, consiguiendo llenos históricos en el Santiago Bernabéu para presenciar esta gesta.
La final, jugada, cómo no, en el Santiago Bernabéu, constituyó una apoteosis madridista donde el resultado era lo de menos. Los mayores quisieron evitar incómodas comparaciones y se impusieron por un rotundo 6-1, pero al final del partido ambos equipos posaron hermanados con el trofeo.
Actualmente sería imposible repetir este hecho. Cada club puede inscribir en Copa del Rey a su equipo A, por lo que la Final de 1980 ha quedado aún más como recuerdo imborrable e irrepetible.
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